El artista argentino Tomás Saraceno, de la mano de Audemars Piguet, presenta Albedo, una instalación que desafía los límites entre la ciencia y el arte y le da a la humanidad la posibilidad de volar alrededor del mundo, sin fronteras y sin contaminación.
Desde 1992, la Fundación Audemars Piguet ha dedicado esfuerzos loables a la conservación de los bosques alrededor del mundo; con programas de protección y educación, la firma suiza ha apoyado más de 110 proyectos en 55 países. Por eso no es de sorprender que haya puesto su mirada en un artista como Saraceno, cuya obra empata con los valores sustentables de la casa relojera ubicada en el idílico Valle deJoux.
La obra de Saraceno, sin embargo, no se reduce a la relación de los humanos con la tierra, también explora la relación del hombre con el universo. ¿Qué sonido tiene el cosmos?, se preguntó alguna vez y, como resultado, presentó Algo-r(h)i(y)thms, una especie de composición sonora que, a través de cuerdas, reproduce sonidos de galaxias y supernovas.
Las expresiones de Saraceno siempre invitan al espectador a participar y Albedo no es la excepción. Las costas de Miami Beach, en el marco de Art Basel, fueron testigos de la instalación que, emulando un reloj, le dio vida a la ya conocida escultura Aerocene.
Todos flotan…
Aerocene es un proyecto artístico que nació en 2015 de la mente de Tomás Saraceno, cuya obra abarca intereses que van del arte y la arquitectura a las ciencias naturales, la astrofísica y la ingeniería.
Junto con toda una red de especialistas interdisciplinarios, Aerocene invita a volar alrededor del mundo sin combustibles fósiles, sin helio, sin baterías. La escultura se eleva sólo con el calor del sol y las radiaciones de la tierra, llevada por las corrientes naturales del aire a donde quiera ir.
Basta prestar atención a la metáfora en su conjunto para darnos cuenta que Saraceno de latinoamericano tiene mucho, la voz para empezar. Aerocene no es solamente una serie de esculturas movidas por el aire, se trata de un discurso potente sobre la dependencia que la sociedad tiene con los combustibles fósiles y la inminencia de sustituirlos; se trata, también, de la libertad de recorrer el mundo sin fronteras.Aerocene, afirma Audemars Piguet, “redefine el derecho global a la movilidad.”, un tema, por cierto, de sumo interés coyuntural por las migraciones masivas que no solamente en nuestro país y nuestra región se están dando, sino en todo el mundo. Berlín, en donde Tomás Saraceno tiene su estudio, es sin duda una de las ciudades donde este señalamiento artístico y velado, despierta mucha sensibilidad.
Aerocene hizo eco en el compromiso que Audemars Piguet tiene con el medio ambiente y con la Tierra, por eso Albedo es la expresión de dos visiones que tienen un común denominador: educar, sensibilizar, despertar. “El interés mutuo en preservar nuestro planeta para las generaciones futuras hace que nuestra colaboración en Miami Beach sea aún más significativa», dijo Saraceno de la instalación que del 5 al 9 de diciembre se exhibirá frente al mar, en Collins Park.
De relojes a relojes…
Albedo es un pabellón a gran escala compuesto por 40 paraguas reflectantes que, uno junto al otro y girados hacia el cielo, forman la figura de un reloj solar. Pero no solamente es un reloj, también es una constelación geométrica y un propósito: el de proteger el equilibrio termodinámico del planeta. La energía del sol levanta la ya conocida escultura y el Aerocene Explorer se alza en el aire.
Como toda obra de Saraceno, Albedo es altamente interactiva e invita al espectador a participar de ella. El clima cálido de Miami será el escenario perfecto para presentar experimentos como la cocina solar comunitaria, un nuevo método con el que los colaboradores de Aerocene buscan comunicar la multifuncionalidad intrínseca de la energía solar. Para que los visitantes puedan volar, las mochilas Aerocene Explorer también estarán disponibles, y una serie de pláticas protagonizadas por Saraceno mismo, la comunidad Aerocene y Audemars Piguet se llevarán a cabo durante toda los días de la muestra.
Desde el diseño hasta la manufactura, cada detalle y cada movimiento, muestran el compromiso de Audemars Piguetcon el arte. En 2013 se asoció con Art Basel y Hong Kong, Basel y Miami ya han sido testigos de las colaboraciones que la firma relojera ha logrado con distintos artistas. Pero Albedo es, sin duda, uno de los discursos más poderosos, como contó Olivier Audemars, vicepresidente del Consejo Directivo: “Tomás es un maestro artesano y es similar a lo que hacemos en Audemars Piguet. Un término como «artista» no necesariamente encapsula la complejidad de su trabajo o visión. También es un científico, maestro y defensor del medio ambiente. La obra de arte en Miami Beach llevará a los proyectos artísticos que Audemars Piguet ha promovido directamente a una nueva altura».