Lo encontramos contento y no es para menos. Después del estreno de Mentada de padre, película en la que alterna con Héctor Suárez en un papel que demanda toda su solvencia como actor, para Osvaldo, uno de los rostros más reconocibles del cine y el teatro mexicanos (amén de su honda huella en TV), sigue el lanzamiento de Monarca, serie de Netflix producida por Salma Hayek, que narra la historia de una poderosa familia tequilera y en la que participan Irene Azuela y Juan Manuel Bernal, entre otros grandes.

BLACK: ¿Cómo fue el proceso para tu participación en Monarca?
OSVALDO BENAVIDES: Me enteré del proyecto por las redes sociales y tuve una corazonada. Cuando le externé a los productores mi interés, me dijeron ¡que ya me tenían contemplado! Se trata de una serie dramática, compleja, con “carnita”. Estoy emocionado.

BLACK: ¿Cuál fue el mayor reto actoral en este caso?
OSVALDO: Encontrar el tono. Es un personaje que se desarrolla en un melodrama bien estructurado…

BLACK: Finalmente, estamos hablando de una forma nueva de hacer las cosas desde las plataformas digitales…
OSVALDO: Sí, hay más oferta y más valor. Es importante que se toquen temas de los que no se habla en otros lados. Trabajar con el elenco de Monarca fue increíble, muy rico y enriquecedor.

BLACK: ¿Qué disfrutaste más de la serie, temáticamente hablando?
OSVALDO: El que se trate de una historia de poder, de corrupción, que gira en torno a un emporio tequilero, los conflictos entre personas. Creo que la serie puede funcionar perfectamente como un espejo de realidades no solo en México, sino en todo el continente.

“Cada actor enriqueció el guion gracias a que hubo libertad. Salma estuvo muy presente, muy metida, trabaja mucho, pero cada quien le aportó algo a su personaje. Me siento afortunado”