Precisión, vanguardia, tecnología de punta, pasión mecánica y amor por el tiempo… la casa suiza de Alta Relojeria y la competencia deportiva motorizada más célebre del planeta forman día con día un equipo imbatible que está cumpliendo su primer lustro.
Reza el lema que cada Rolex cuenta una historia. Y la marca ginebrina es, por naturaleza, un libro historia pura. Además de sus logros en mar y cielo, son una infinidad los capítulos únicos e irrepetibles de su relación con el mundo automovilístico. Desde que en los años 1930 Sir Malcolm Campbell rompió el record mundial de velocidad sobre tierra llevando en la muñeca un reloj Rolex, la marca no ha dejado de estar presente como patrocinadora o cronometrista oficial de hitos como Daytona, Le Mans y, por supuesto, la Fórmula 1, de las que es Socio Mundial y Reloj Oficial desde 2013. La perfección de esta dupla cobra vida en el “Role Pit Lane Clock”, pieza fundamental en la gran fiesta que es cada fecha Fórmula 1. Las pasadas fechas en el Autódromo Hermanos Rodríguez fuimos testigo del éxito total de la carrera número 19 del campeonato 2018.
Por si fuera poco, este año está marcado por un aniversario sumamente especial. Sir Jackie Stewart y Rolex están cumpliendo 50 años de una amistad que comenzó oficialmente cuando el tres veces campeón de la Fórmula 1 y héroe de los amantes de las carreras se convirtió en uno de los Testimonees de la casa suiza.
Champion racing driver Jackie Stewart, UK, 6th March 1970. (Photo by Norman Quicke/Daily Express/Getty Images)
Y para más páginas de antología las que ha escrito Sir Jackie Stewart dentro y fuera de las pistas: campeón mundial del llamado “Gran Circo” en 1969, 1971 y 1973, el “Esocés Volador” ha sido además pieza clave en la adopción de los estándares de seguridad actuales en las carreras y portavoz del deporte motorizado en todo el mundo. La suya, a bordo de un auto de los equipos BRM, Matra, March o Tyrrelly, portando su casco adornado con un diseño del tartán real de la familia Stewart es una de las imágenes del siglo XX en el deporte.
“Ha sido un viaje fantástico”, dice la leyenda escocesa del volante. “Nuestra sociedad con él forma parte esencial de nuestra riqueza histórica”, afirma por su parte la mítica marca relojera. Este entusiasmo se extiende sin duda a todo el universo que han creado Rolex y Fórmula 1, un mundo que, sencillamente, marcha (a toda velocidad) sobre ruedas.
