La teoría más aceptada acerca del porqué al beisbol se le llama el “Rey de los Deportes” remite al físico alemán Albert Einstein, quien al llegar a Estados Unidos empezó a interesarse por este juego, debido a la complejidad de sus reglas y la precisión al jugarse. Desde que Abner Doubleday, quien fungiera como oficial del ejército de la unión durante la guerra civil de Estados Unidos (1861-1865) lo inventara (tal es la teoría que más adeptos tiene sobre la creación de este deporte), mucho ha trascendido y, con el paso del tiempo, el beisbol ha transformado relaciones sociales, mejorando situaciones económicas, y también formado parte de estrategias políticas en administraciones que lo ven como un impulso para la juventud.

 

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El beisbol ha brindado la oportunidad de que la sociedad mejore su relación entre sus pares. En 1947, cuando la segregación racial en Estados Unidos era muy fuerte y mantenía a los ciudadanos afroamericanos de ese país marginados de una convivencia completa, sucedió un acontecimiento que comenzaría un cambio paulatino y lento hacia la convivencia entre todos los ciudadanos.

En 1947, el 15 de abril, Jackie Robinson se convirtió en el primer afroamericano en jugar un partido de Grandes Ligas. Ese día haría su debut con la franela de los Dodgers de Brooklyn, y sería quien anotara la carrera de la victoria. Pero esa primera temporada estaría plaga-da de amenazas de muerte, agresiones en el diamante por parte de sus rivales, quienes le tiraban a propósito bolas a la cabeza o el cuerpo, le escupían en los zapatos, y hasta sus propios compañeros de equipo intentaron armar una rebelión, pues no lo querían con ellos. Siempre con una actitud de respeto y silencio ante las vejaciones, Robinson finalizó esa primera temporada como novato del año. A 72 años de la aparición de Robin-son en un juego oficial de la MLB, ¿cómo está actualmente el circo de la gran carpa en cuanto a participación de jugadores afroamericanos? Para el inicio de la década de 1980 había 18.7% de jugadores, actualmente ese porcentaje se ha reducido a únicamente 8.4%. Esto resalta mucho contra otros deportes, como el basquetbol, pues en la NBA el porcentaje es de 74 por cada cien…

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En los últimos años los jóvenes afroamericanos han perdido el interés por jugar al beisbol. A pesar de que en el deporte de la pelota caliente los sueldos son jugosos, y garantizados por largas temporadas, la juventud no siente emoción e ilusión por formar parte de la MLB, ya que lo considera un deporte sin tanto poder de atracción, como la NFL o la NBA. Los altos ratings televisivos que mantiene el futbol americano, así como la interacción de marcas en el basquetbol profesional, los hace más apetitosos para los niños y adolescentes, que el beisbol.

De acuerdo con algunos estudios, 45% de la población joven de afroamericanos vive en la pobreza. Pocos son quienes podrían comprar el equipamiento necesario para practicar el beisbol, por ello se inclinan por otros deportes, donde les apoyan hacia adquirir lo necesario para practicarlo, sin desembolsar nada. Por eso, en nuestros días es más complicado tener estrellas afroamericanas jugando para la MLB que motiven e inspiren a los niños y jóvenes a practicarlo más…

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